Morena vs. Morena
Morena, refugio del desecho del PRIAN: El reciclaje político que avergüenza a Chihuahua y desenmascara a la 4T

La política en Chihuahua vive un momento de reciclaje vergonzoso: personajes señalados por corrupción y oportunismo se han refugiado en las filas de Morena, comprando espacios de poder a una dirigencia que parece más interesada en los acuerdos oscuros que en la transformación prometida.
Por un lado, Marco Quezada, quien fuera la mano derecha de César Duarte —exgobernador prófugo de la justicia y señalado por corrupción en la tragedia del Aeroshow, Quezada ha sido derrotado electoralmente en múltiples ocasiones, incluso como candidato de Morena a la alcaldía y a la diputación federal, pero sigue aferrado al poder.
Le acompaña Brenda Ríos, otra figura cercana al duartismo. Basta recordar que César Duarte y su esposa Bertha Gómez fueron sus padrinos de boda. Ríos ha transitado por varios partidos, buscando influencias y permisos para impulsar proyectos que han generado daños ambientales en el estado, ella y su esposo Alex Lebaron se dedican a saquear el agua a través de pozos clandestinos en todo el estado. Su historial la señala como una de las responsables del ecocidio en varias regiones de Chihuahua.
También está el caso del “niño despechado” del PAN, Miguel Latorre otro lacayo del peor Gobernador de la historia de Chihuahua Javier Corral, quien en videos se proclamaba “panista de nacimiento y panista de corazón”. Sin embargo, al no obtener una candidatura plurinominal, dio el salto inmediato a Morena, mostrando que sus convicciones eran tan frágiles como su ambición es grande.
Todos estos personajes tienen algo en común, además de su historial de corrupción: su oportunismo. Han logrado infiltrarse en Morena comprando lealtades dentro de su dirigencia estatal, pese a sus trayectorias políticas ampliamente cuestionadas.
El riesgo es claro: la supuesta regeneración política corre el peligro de convertirse en un simple reciclaje de lo peor del pasado.